La realidad de la epilepsia en la educación
By: Daniela Tarré
Hoy voy a hablarles de la epilepsia y las particularidades que presenta en la educación.
La epilepsia es un trastorno cerebral en el cual una persona tiene convulsiones repetidas durante un tiempo. Las convulsiones son episodios de actividad descontrolada y anormal de las neuronas que puede causar cambios en la atención o el comportamiento.
¿Cúales son las causas?
La epilepsia ocurre cuando los cambios en el tejido cerebral hacen que el cerebro esté demasiado excitable o irritable. Como resultado de esto, el cerebro envía señales anormales. Esto es lo que ocasiona convulsiones repetitivas e impredecibles. (Una sola convulsión que no sucede de nuevo no es epilepsia)
¿Cúales son sus síntomas?
Los síntomas varían de una persona a otra. Algunas personas pueden tener simples episodios de ausencias. Otras tienen temblores violentos o pérdida de lucidez mental. El tipo de convulsión depende de la parte del cerebro afectada.
La mayoría de las veces, la convulsión es similar a la anterior. Algunas personas con epilepsia tienen una sensación extraña antes de cada convulsión. Estas sensaciones pueden ser hormigueo, sentir un olor que realmente no existe o cambios emocionales.
Fuente: medlineplus.gov
Algunas de las afectaciones que pueden tener en el estudio y aprendizaje las personas epilépticas son: la atención, la concentración y la memoria, lo que dificulta el proceso de adquisición de conocimientos.
Las convulsiones pueden afectar el aprendizaje ya que pueden ocurrir durante las clases, lo que distrae tanto al estudiante afectado como a sus compañeros.
Además de las convulsiones, las personas epilépticas pueden experimentar otros problemas como la dificultad en la atención, el lenguaje y la memoria. Estas dificultades pueden dificultar la comprensión de conceptos nuevos, la retención de información y la expresión verbal.
Algunos medicamentos anticonvulsivos pueden causar efectos secundarios cognitivos, como la disminución de la velocidad de procesamiento mental o alteración de la concentración, por lo que estos efectos secundarios pueden afectar negativamente el rendimiento académico de las personas.
Es por esto que es importante que los profesores y el personal escolar estén informados sobre la condición del estudiante y cómo responder adecuadamente a una convulsión. Se pueden implementar estrategias educativas individualizadas, como proporcionar tiempo adicional para completar tareas o adaptar el entorno de aprendizaje.
Existen distintos tipos de convulsiones, conocidos como:
Convulsiones tónico-clónicas generalizadas: Estas convulsiones afectan a todo el cerebro. Durante esta convulsión, la persona puede perder el conocimiento y presentar movimientos bruscos.
Convulsiones atónicas: Se caracterizan por una pérdida repentina y breve del tono muscular, lo que provoca que la persona caiga al suelo o pierda el control de su postura.
Convulsiones focales: Estas convulsiones afectan inicialmente a una parte específica del cerebro, pueden incluir movimientos involuntarios, sensaciones anormales o cambios en la conciencia.
Convulsiones mioclónicas: Son sacudidas musculares rápidas e involuntarias que pueden afectar a partes del cuerpo o a todo el cuerpo.
Convulsiones de ausencia: Estas convulsiones se caracterizan por una breve pérdida de conciencia y una apariencia ausente o de mirada fija.
Recomendaciones para ayudar en la educación de las personas epilépticas:
Una buena manera de ayudar es familiarizarnos con los síntomas, para saber reconocerlos y de esa manera poder actuar correctamente si ocurre alguna crisis durante las clases.
Algo de vital importancia es que el personal escolar y familiares estén al tanto de la condición de la persona, así como de los procedimientos en caso de una crisis.
La epilepsia no representa una limitación o un obstáculo para el aprendizaje de los niños y las personas en general, pero es importante hacérselo saber y trabajar en su confianza y seguridad.
Mantener la concentración en clase es vital para un buen aprendizaje, ayuda al estudiante con métodos como reduciendo las distracciones, utilizando estructuras o técnicas de atención plena; también puedes involucrar técnicas sensoriales como el uso de colores, imágenes, sonidos y movimientos, para ayudar al estudiante a retener información.
Es necesario también que el entorno cercano en la institución educativa, es decir, los compañeros, sepan la realidad y como actuar ante determinados eventos que puedan suceder, tales como convulsiones o desconcentraciones en cualquier momento de el día.
En conclusión, el diagnostico de epilepsia no es impedimento para el desarrollo y aprendizaje de una persona, sin embargo, hay ciertas consideraciones que se deben seguir para garantizar los mejores resultados. Este artículo ha pretendido colaborar y aportar ciertas recomendaciones y sugerencias para superar los posibles obstáculos que se pueden presentar.